Adicción que mata más que las drogas

0

 


Las relaciones tóxicas, algo que te mata por dentro, algo que acaba contigo y con tus sentimientos poco a poco…

Cada vez está más normalizado el querer mal, nosotros no nos damos cuenta de que este tipo de “amor” no es amor real sino una ficción a la que estamos acostumbrados. Hoy en día vemos amor tóxico por todo: en el cine, en casa, en el instituto y sobre todo en nuestras amistades.

Tóxico es algo que te daña hasta tal punto que acabas con tus límites, con tu autoestima y con tu amor propio. Te enfadas contigo mismo por permitir que te traten mal, por no soltar a esa persona y acabar con la situación, pero esto realmente solo pasa porque estás enganchado. Pero… ¿ por qué estamos enganchados? ¿Por qué no sabemos poner límites?

Todo empieza donde nos criamos, en nuestra casa. La sociedad está acostumbrada a construir mucho ego pero poco amor propio, debido a esto siempre volvemos a caer en este patrón sin ser conscientes del porqué.

Dejar a alguien no duele, querer a alguien tampoco duele y perdonar tampoco debe doler.



En la imagen anterior vemos una representación de las fases de una relación tóxica, se da tanto en hombres como en mujeres y en nuestra sociedad tal situación está muy poco debatida.

Cuando somos pequeños aprendemos “mates", sociales, lenguas… pero nunca aprendemos cómo querernos bien. Se dice que eso lo deben hacer los padres pero… ¿qué pasa cuando los padres tampoco se quieren? ¿Qué pasa si hay maltrato en casa? ¿Cómo va a saber un padre o una madre enseñarle a su hijo a amarse?

Confundimos el amor propio con el ego. El ego es creerse superior, el amor propio es saber que hay mejores y peores personas, pero jamás nadie igual a uno mismo.



Entonces lo primero que debemos hacer para evitar estas relaciones tóxicas será pasar tiempo con nosotros mismos, descubrirnos, aprender de nosotros, saber lo que queremos y lo que no y, sobre todo, amarnos mucho y poner límites enseguida que veamos algo raro… ya que un amor que provoca más lágrimas que sonrisas no es un amor sano, es un amor tóxico.





Escrit per Elena Livia Koehli (alumna de 2n de FPB de Perruqueria i Estètica)

Potser t'agraden aquestes entrades

No hi ha comentaris